Las Allegadas poseen una granja situada varias millas al norte de la ciudad de Ebou Dar, en medio de la campiña altaranesa. La granja es utilizada como punto de encuentro y lugar de paso de las Allegadas que entran y salen de Ebou Dar, así como sitio de contemplación y penitencia. Entre la sociedad ebudariana y del sur de Altara tiene fama de ser un lugar dedicado al retiro espiritual, algo que no dudan en alimentar las Allegadas aceptando solicitudes de todo tipo de mujeres que deseen pasar una temporada tranquilas en el campo. Aunque las Allegadas permiten que cualquier mujer resida en la granja sin importar su estatus social, las obligan a adecuarse a sus reglas, encaminadas a un trabajo duro y coordinado en el que todas colaboren por igual, sin importar su condición.
La granja se encuentra a mucha distancia de cualquier otra ciudad o pueblo, aislada del resto del mundo y protegida por tres colinas. Es un lugar autosuficiente con una docena de pequeñas viviendas y cuatro enormes graneros construidos en la cima de una de las colinas. Se sabe que también posee plantaciones de olivos al norte y al este de las viviendas principales. Sin lugar a dudas, es un sitio donde reina la calma y el silencio, pero tiene capacidad de albergar a más de cien personas, todas ellas mujeres, ya que no se permite la presencia de hombres ni de niños. De hecho, la granja podría ser confundida con una pequeña aldea hasta que el visitante se percatara de que todas sus residentes son mujeres.
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Después de encontrar el Cuenco de los Vientos en Ebou Dar, Nynaeve al'Meara, Elayne Trakand y Aviendha acuerdan partir de la ciudad y marcharse a un sitio seguro en el que poder activar el ter'angreal sin tener Amigos Siniestros pisándoles los talones. Al tener noticia de la existencia de la granja de las Allegadas, deciden que aquél es el lugar idóneo y se dirigen allí acompañadas de las otras Aes Sedai, las Allegadas y las Detectoras de Vientos. En la granja son recibidas por Alise Tenjile, la Emparentada que con mano de hierro se asegura que el lugar funcione, y allí utilizan el Cuenco de los Vientos para tratar de poner fin a la ola de calor en la que se ha sumido el mundo.
A consecuencia de la gran cantidad de Poder Único desplegada durante el empleo del Cuenco de los Vientos, todas las personas que se encuentran en la granja se ven obligadas a huir a Andor con Elayne y los demás, ya que han llamado la atención de los seanchan. La granja de las Allegadas es totalmente destruida durante la huida, a consecuencia de la enorme explosión causada cuando Elayne trata de deshacer el acceso para que sus enemigos no les puedan seguir el rastro.