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Couladin

Couladin

La Guerra Shaido es el nombre que se le suele dar a la serie de conflictos ocasionados entre 999 y 1000 NE por la invasión de las tierras húmedas por uno de los doce clanes Aiel al completo, los Shaido. Aunque por algunos esta guerra bien podría ser considerada la Segunda Guerra de Aiel, en realidad la lucha con los Shaido no tiene nada que ver ni en sus causas, naturaleza, desarrollo o consecuencias con la Guerra de Aiel de 976 - 978 NE.

Causas[]

Al igual que las otras naciones, los Aiel poseen una colección de profecías en las que se anuncia la llegada de una persona que los unirá y guiará hasta la Última Batalla. En su caso, se habla de El Que Viene con el Alba, un hombre con sangre Aiel pero criado al otro lado de la Pared del Dragón que estará destinado a convertirse en el Car'a'carn, el jefe de jefes de clan, y a unificar los Aiel, liderarlos en la lucha y destruirlos, salvo a un resto del resto. En busca de El Que Viene con el Alba, varios grupos de Aiel cruzaron sin llamar la atención la Pared del Dragón entre 998 y 999 NE y, tras muchas pesquisas, acabaron descubriendo a Rand al'Thor y le ayudaron a conquistar la Ciudadela de Tear. Con este gesto quedó confirmado no sólo su condición de Dragón Renacido, sino que también era él a quien buscaban los Aiel, ya que el nombre secreto de aquel pueblo no es otro que el "Pueblo del Dragón".

Rand acudió a Rhuidean para someterse a la prueba que debía confirmarle como Car'a'carn y ya antes de ello se encontró con la oposición de Couladin, guerrero Shaido que esperaba en Chaendaer el permiso de las Sabias de poder entrar él mismo en la ciudad sagrada de los Aiel. Pese a las quejas de Couladin, Rand fue a Rhuidean y pasó a través de las columnas de cristal, superando la prueba de ver las sorprendentes raíces de los Aiel y remontándose a sus orígenes, en los años de la Era de Leyenda y el Desmembramiento del Mundo. A su regreso a Chaendaer, Rand presentaba las marcas en sus dos brazos que lo señalaban indudablemente como el Car'a'carn. Él y sus compañeros se dirigieron a Alcair Dal para que la totalidad del pueblo Aiel presenciara su consagración como jefe de jefes, mas al llegar allí se encontró con que los Shaido lo tildaron de impostor y apoyaron a Couladin, quien inexplicablemente presentaba también las marcas del Car'a'carn en sus brazos. Más adelante se explicaría que Asmodean fue el responsable de la aparición de estas señales en los brazos de Couladin, con el objetivo de dividir a los Aiel y debilitar la posición del Dragón Renacido.

Ante los desconcertados ojos de cientos de miles de Aiel de los doce clanes, Rand y Couladin comenzaron a discutir acerca de cuál de ellos era el verdadero Car'a'carn. Consciente de que el Shaido no había llegado a entrar en Rhuidean, Rand le retó a revelar lo que había visto en las columnas de cristal y, al no obtener una respuesta satisfactoria, fue él quien contó a todo aquel público la realidad sobre el pasado de los Aiel. Este hecho supuso un tremendo golpe emocional a los Aiel que dio lugar al marasmo, pero los jefes de clan no tuvieron más remedio que dar la razón a Rand y confirmarlo como el Car'a'carn. En contraste, los Shaido mantuvieron su apoyo a Couladin y se dejaron guiar por él al oeste, hacia la conquista de las tierras húmedas. El nuevo líder de los Shaido declaró sus intenciones de dar fin a la dura existencia de su pueblo en la tierras de los tres pliegues y conquistar las tierras húmedas y a sus débiles habitantes.

Desarrollo[]

Sevanna3

Sevanna

La totalidad del clan Shaido, incluyendo a no menos de 160.000 guerreros, cruzaron la Pared del Dragón y entraron en Cairhien, dando comienzo a una conquista a fuego y sangre. El reino llevaba sufriendo varios meses de guerra civil, y la llegada de una nueva invasión de Aiel supuso un gravísimo golpe a su ya maltrecha situación, hasta el punto de que sus soldados no pudieron hacer otra cosa que acantonarse en la capital, ayudados por el contingente teariano que había sido enviado allí previamente por Rand. El Car'a'carn, por su parte, reunió bajo su mando siete clanes y dirigió a los Aiel en persecución de los Shaido, dándoles alcance ante las murallas de la ciudad de Cairhien, después de haber presenciado varias masacres y ciudades arrasadas por Couladin y los suyos.

En la Segunda Batalla de Cairhien, Rand infligió una contundente derrota a los Shaido y Mat Cauthon dio muerte a Couladin en combate singular. Sin embargo, la muerte de su líder y aquél a quien consideraban el auténtico Car'a'carn no significó el fin de los Shaido y de su invasión. El liderazgo del clan pasó a ser desempeñado por Sevanna, viuda de Suladric y amante de Couladin, quien reagrupó a los supervivientes en la Daga del Verdugo de la Humanidad. El único deseo de Sevanna era dominar sobre la totalidad de las tierras húmedas y vivir rodeada de lujos infinitos casada con Rand al'Thor, por lo que no dudó en traicionar a las Aes Sedai fieles a Elaida y lanzar a 40.000 guerreros y 400 Sabias sobre ellas cuando éstas secuestraron al Dragón Renacido. Durante la Batalla de los Pozos de Dumai y en medio de lo que se prometía una incursión sencilla en la que poder capturar a Rand sin grandes problemas, los Shaido fueron a su vez atacados por una fuerza de rescate del Dragón Renacido encabezada por su amigo Perrin Aybara. En el clímax de la lucha, Rand recuperó la libertad y los Asha'man llegaron en su ayuda, ocasionando una auténtica masacre entre los Shaido, con decenas de miles de muertos.

Sevanna reagrupó a los restos de su clan de nuevo en las montañas, más ansiosa que nunca de someter a Rand y de hacer que el mundo entero temiera a los Shaido. Cegadas por su ambición, Sevanna y las principales Sabias aceptaron las "cajas de traslación" que les entregaron Sammael y Graendal disfrazados, prometiéndoles que con ellas podrían llegar a nuevas tierras más prósperas e indefensas para conquistar. Los Shaido cayeron de lleno en la trampa preparada por Sammael, que con la ayuda de Graendal abrió decenas de accesos a lo largo de todo el sur y el oeste del continente para dispersar al clan y contribuir al creciente caos y desorden en aquellas zonas del mundo. Por haber quedado divididos en pequeños grupos, parte de los grupos de Shaido fueron destruidos por las fuerzas del Dragón Renacido o por los seanchan no mucho después de haber sufrido el engaño de Sammael.

Therava

Therava

No obstante, Sevanna fue lo suficientemente inteligente como hacerse rodear por todas las Sabias capaces de encauzar el Poder Único y por el contingente más numeroso de guerreros, por lo que se grupo causó auténticos estragos en Ghealdan y Altara antes de establecerse en la ciudad de Malden. La obsesión de los Shaido de hacerse rodear de todo tipo de sirvientes había provocado ya por entonces que contasen con decenas de miles de gai'shain tomados entre habitantes de las tierras húmedas, una costumbre muy mal vista entre el resto de clanes de Aiel. Entre estos cautivos se encontraban la reina Alliandre de Ghealdan y Lady Faile Bashere, por lo que no es de extrañar que su marido, Perrin Aybara, centrase todos sus esfuerzos en dar caza y en aniquilar a los Shaido. Formando una inesperada alianza con los seanchan y los Juramentados del Dragón, Perrin lanzó un contundente ataque sobre Malden, después de haberse deshecho de las Sabias encauzadoras contaminando los suministros de agua de la ciudad con horcaria.

Aunque ya por entonces Sevanna había conseguido reunir de nuevo a muchos de los septiares que habían sido dispersados por Sammael, sus fuerzas no pudieron hacer nada contra sus enemigos y los Shaido fueron destrozados en Malden. Centenares de Sabias fueron convertidas en damane, la gran mayoría de los gai'shain fueron liberados y Sevanna fue capturada por los seanchan. Sólo sobrevivieron unos pocos miles de Shaido a la catástrofe de Malden, con lo que se puede considerar que este enfrentamiento supuso el final definitivo de la Guerra Shaido. La Sabia Therava asumió el liderazgo de los restos de su clan y ordenó el inmediato regreso a la tierra de los tres pliegues, con la promesa de no volver a cruzar en varias generaciones la Pared del Dragón.

Principales enfrentamientos[]

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