La Rueda del Tiempo Wiki
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Sevanna
Sevanna3
Información cronológica
Primera mención EADLS 49
Primera aparición EADLS 57
Última aparición CDS 30
Última mención TDM 16
Información biográfica
Nombre completo Sevanna
Nacionalidad Aiel
Nacimiento ca. 973 NE
Información política
Rango Sabia (VI - XI)
Afiliación Shaido
Ocupación Líder de los Shaido (IV, V - XI)
Descripción física
Género Mujer
Complexión Esbelta y sensual
Estatura Alta
Pelo Dorado
Ojos Verdes
Familia
Suladric (esposo)
“Sevanna es más artera y poco digna de confianza que cualquier otro Shaido jamás nacido”
   —Rhuarc

Sevanna es una mujer perteneciente al septiar Jumai de los Shaido Aiel. Como Señora del techo del dominio Comarda y viuda de Suladric, actúa como jefe de clan en funciones hasta que uno nuevo sea elegido. Sin embargo, Sevanna es una mujer tremendamente ambiciosa y está dispuesta a todo con tal de mantener su cuota de poder o alcanzar una aún mayor, y hará todo lo que esté en sus manos por conseguirlo, aunque sea traicionando la ancestral forma de vida de su pueblo.

Apariencia[]

Sevanna es descrita como una mujer muy atractiva recién entrada en una edad mediana y muy consciente de sus múltiples encantos. Tiene los ojos de un deslumbrante color verde esmeralda y el cabello dorado y lustroso, que lleva suelto o sujeto con un pañuelo a la usanza Aiel. Su boja es carnosa y de labios carmesíes, y tiene un marcado busto que no duda de mostrar con un escote escandoloso como pocos. Por más que vista como la mayoría de las mujeres Aiel, con una camisa blanca, una falda de tonalidad parda y botas altas, Sevanna es fácilmente distinguible por preferir finos tejidos de seda a los más funcionales de lana. Su gusto por el lujo es difícilmente igualable y lo demuestra luciendo decenas de brazaletes, pulseras, collares, pendientes y todo tipo de joyas de la más exquisita factura.

Historia[]

Desde su adolescencia Sevanna ha ansiado el poder, y se dice que fue por ello por lo que se casó con Suladric, el jefe del clan Shaido, a la temprana edad de dieciséis años. Al enviudar unos años más tarde, Sevanna no estaba en absoluto dispuesta a renunciar a su papel como Señora del techo. Actuando como jefe de clan de los Shaido hasta que uno nuevo fuese elegido, Sevanna dirigió a su pueblo y comenzó a seducir a los jóvenes Muradin y Couladin, por ser ellos quienes más opciones tenían de ser elegidos por las Sabias para acudir a Rhuidean y someterse a la prueba.

Sinopsis[]

El ascenso de la Sombra[]

Muradin recibe el ansiado permiso de las Sabias de entrar en Rhuidean y llegar a ser jefe de clan de los Shaido en caso de regresar con vida. Sevanna había hecho planes para casarse con él a su vuelta, pero las visiones contempladas en las columnas de cristal fueron demasiado duras para Muradin y no volvió a salir del ter'angreal. Couladin, primer hermano de Muradin, no consigue que las Sabias consientan en dejarle entrar en Rhuidean y, enfurecido al ver que se concede el paso a Rand al'Thor y algunos de sus compañeros de las tierras húmedas, avisa a Sevanna para que se reúna con él en Alcair Dal antes de que lleguen el resto de clanes Aiel. Una vez que los doce clanes se encuentran representados en la enorme explanada, Rand muestra en sus brazos las marcas que lo señalan como el Car'a'carn, el jefe de jefes y aquél destinado a llevar a los Aiel a su mayor gloria, mas también a su destrucción.

Icono Aiel.svg

Secundado por Sevanna, Couladin interviene y deja estupefactos a todos los presentes al mostrar las mismas marcas que tiene Rand y afirmar que él es el verdadero Car'a'carn. Para demostrar que el Shaido es un impostor, Rand revela toda la crudeza del pasado de los Aiel que ha contemplado en Rhuidean. Con este gesto acabará siendo reconocido como el Car'a'carn por todos los clanes excepto el Shaido, pero muchos de los Aiel no podrán soportar la realidad y, aquejados del marasmo, abandonarán su forma de vida. Los Shaido, impulsados por Sevanna, reconocen pese a todo a Couladin como el Car'a'carn y se encaminan al oeste de la Pared del Dragón con la intención de saquear las tierras húmedas bajo el hombre al que creen destinado a llevarle a las mejores glorias lejos de la Tierra de los Tres Pliegues. A Sevanna no le supone ningún esfuerzo convencer a Couladin de que está enamorada de él y, pese a que no llegan a contraer matrimonio, la pareja dirige conjuntamente al clan durante los comienzos de la Guerra Shaido.

Cielo en llamas[]

Aunque Sevanna no aparece ni es mencionada en ningún momento de este libro, se sabe que desempeña un papel fundamental en la destrucción desatada por los Shaido en el ya de por sí agitado reino de Cairhien hasta que los Aiel llegan a las puertas de la capital. Los Shaido se apartan del ji'e'toh que siguen los demás Aiel y empiezan a tomar como gai'shain a todos los prisioneros que hacen, pese a ser habitantes de las tierras húmedas. Este acto y muchos de los otros que le siguen escandalizan a los demás Aiel, mas es probable que fuese la propia Sevanna quien estuviese detrás de esta idea. Rand y los clanes Aiel restantes dan alcance a los Shaido y se enfrentan a ellos en la Segunda Batalla de Cairhien. En ella Mat Cauthon se enfrenta a Couladin y le da muerte, con lo que el liderazgo del clan pasa a depender de nuevo exclusivamente de Sevanna.

El Señor del Caos[]

Derrotados por Rand al'Thor, los Shaido se retiran al norte, hacia la Daga del Verdugo de la Humanidad. Sevanna y las Sabias Therava y Desaine se entrevistan con la embajada de Aes Sedai fieles a Elaida enviada a Cairhien y acceden a colaborar en el plan de secuestrar a Rand y llevarlo a la Torre Blanca. Las hermanas planean enviar a su escolta, los Cachorros, a combatir con los Shaido y así eliminar su molesta presencia con la aquiescencia de Sevanna. Lo que no esperaban las Aes Sedai era que la líder de los Shaido tuviese su propa agenda y pretenda deshacerse de las mujeres de la Torre Blanca, hacer prisionero a Rand, obligarle a casarse con ella y los dos gobernar los doce clanes Aiel, unidos para siempre. El mismísimo Sammael había dado alas a Sevanna en su arriesgada empresa, al presentarse disfrazado ante ella y entregarle una caja comunicadora con instrucciones de utilizarla en cuanto tenga a Rand en su poder.

Mientras el grueso del clan permanece en las proximidades de la Daga del Verdugo de la Humanidad, Sevanna regresa a Cairhien con Therava, Emerys y otras Sabias y se instala un tiempo en el campamento de las Sabias leales a Rand. Éstas reprueban la conducta de los Shaido, pero su toh les impide expulsar a Sevanna y las demás e incluso deben admitir a la líder Shaido como una de las suyas, aunque no haya visitado nunca Rhuidean ni haya sido admitida nunca como aprendiza. Esto se debe a que las Sabias Shaido han empezado a tratarla como una Sabia más después de que la orgullosa mujer se impusiera a ellas, y ha forzado al resto de Sabias a hacer lo mismo. Las Shaido permanecen con las demás Sabias hasta que Rand regresa a Cairhien y entonces vuelven a partir sin dar más explicaciones.

Sevanna

Sevanna (por Richard Boyé)

Una vez que las Aes Sedai han conseguido capturar a Rand, Sevanna pone en marcha sus propios planes y convence a trece Sabias capaces de encauzar el Poder Único de matar a Desaine, por haberse opuesto a ella en el pasado. Las Sabias que se alinean con Sevanna aceptan con no poca resistencia realizar el asesinato y culpar a las Aes Sedai de él, aunque este hecho acaba siendo una losa que terminará por agriar las relaciones de Sevanna con Therava y las otras Sabias. No obstante, la muerte de Desaine enfurece a los Shaido y les impulsa a romper su ancestral juramento y atacar a las Aes Sedai en la Batalla de los Pozos de Dumai, en la que participan no menos de 40.000 algai'd'siswai. Desde un lugar seguro, Sevanna contempla la lucha rodeada de las más poderosas Sabias y segura de su inminente victoria. Mas, inesperadamente, entran en escena las fuerzas de rescate de Rand dirigidas por Perrin Aybara y los Asha'man combaten por primera vez, pillando por sorpresa a los Shaido y aniquilándolos en cuestión de segundos. Aterrorizados ante el despliegue de fuerzas y conmocionados al ver que incluso las Sabias fieles a Rand se han unido a la lucha, Sevanna y los Shaido huyen y regresan a la Daga del Verdugo de la Humanidad.

La Corona de Espadas[]

Los Shaido tardan varios días en reagruparse en torno a Sevanna, pero ella no pierde el tiempo y, ordena a las Sabias Alarys, Belinde, Meira, Modarra, Rhiale, Tion y Someryn que use la caja comunicadora para convocar a Caddar, el alias con el que se presentó Sammael. El Renegado acude con Graendal, a quien presenta como Maisia, y acepta facilitar a los Shaido un método para Viajar a lugares con más riquezas para prepararse para una nueva ofensiva contra Rand. Unos días más tarde, Sammael y Graendal conminan a Sevanna a moverse haciéndole creer que Rand ha enviado a varios clanes Aiel tras los Shaido y abren numerosos accesos, pretendiendo que son creados mediante unas "cajas de traslación". Mas todo forma parte de la treta de los Renegados, quienes usan los accesos para dispersar a los Shaido por todo el sur de las Tierras Occidentales, desde Tarabon hasta Illian, para contribuir a la inestabilidad y al caos del mundo. Sevanna no se esperaba ser traicionada por "Caddar", pero tampoco confiaba totalmente en él y se aseguró Viajar acompañada de todo el septiar Jumai y las cerca de 400 Sabias capaces de encauzar, emergiendo todo el grupo en Ghealdan.

El Camino de Dagas[]

Las Sabias antes aliadas con Sevanna empiezan a comprender que han sido engañadas y que han sido un instrumento de fuerzas mayores, por lo que culpan a su líder de haber llevado al clan al borde de la desaparición. Comienza a existir una puja evidente por el poder entre ellas, y finalmente la temible Therava se impone y le dice a Sevanna que, mientras actúe como jefe de clan, ella hará las veces de su principal consejera Sabia. Sevanna no tiene más remedio que aceptar y accede a moverse, pero en lugar de alejarse de los ejércitos seanchan en dirección norte, opta por hacerlo encaminándose al este. Las crecientes diferencias entre Sevanna y Therava se trasladan a una de las más preciadas posesiones de la líder Shaido, Galina Casban, la Aes Sedai capturada en los Pozos de Dumai y convertida en su gai'shain. Ansiosa por tener una persona que encauce que la obdezca ciegamente, Sevanna hace jurar sumisión a Galina a través del vinculador que le entregó Caddar, mas Therava interviene e incluye en este juramento a las demás Sabias, con especial preeminencia a ella misma.

El Corazón del Invierno[]

Con el transcurso de los eventos, Sevanna se ha ido volviendo más egoísta y avariciosa y ha dejado de lado la práctica totalidad del ji'e'toh. Bajo sus órdenes, las lanzas Shaido saquean pueblos y ciudades, se hacen con numerosas riquezas, montañas de joyas y miles de gai'shain. La propia Sevanna tiene decenas de gai'shain para atenderla incluso mientras duerme. La vanidosa Aiel prefiere con mucho que la sirvan personas que antes fueron nobles o dirigentes de alguna clase. Por ello, cuando llegan ante ella nuevas prisioneras y se entera de que entre ellas están la reina Alliandre de Ghealdan y Faile Bashere, una mujer ante la cual la anterior es una simple vasalla, ordena que las dos y la doncella de Faile Maighdin Dorlain (que irónicamente también es una reina, Morgase de Andor) pasen a engrosar las filas de sus gai'shain. En los días posteriores las tres mujeres obedecen a Sevanna y se someten a ella hasta en sus más ridículos caprichos y son castigadas ante la falta más nimia, de acuerdo con el humor con el que se encuentre la líder Shaido.

Encrucijada en el crepúsculo[]

Ignorando los consejos de Therava, Sevanna está empeñada en pasar el invierno en la ciudad altaranesa de Malden, en un lugar lleno de riquezas y recursos naturales que los Shaido pueden disfrutar mientras esperan que el resto de septiares dispersos por las proximidades se reúnan con ellos. Sevanna se ha lanzado a una vida despreocupada y llena de todo tipo de lujos y comodidades, mientras los Shaido hacen lo mismo. Cada vez queda menos de Aiel en su comportamiento, pues bajo el liderazgo de Sevanna han acabado por asumir una visión totalmente pervertida del ji'e'toh y pasan la mayor parte del tiempo ebrios, causando problemas y aprovechándose de sus indefensos gai'shain.

Cuchillo de Sueños[]

Sevanna2

Sevanna

Las disputas entre Sevanna y Therava continúan, ya que la segunda desea que los Shaido abandonen Malden cuanto antes, reúnan a las lanzas que estén dispersas por Altara y elijan a un nuevo líder. Con esta intención, ella y las demás Sabias han enviado a Rhuidean a Bendhuin sin que Sevanna lo supiera con antelación, algo que la enfurece. En realidad, ella no ha abandonado su intención de casarse con Rand al'Thor y gobernar a toda la nación Aiel. Las semanas que llevan los Shaido en Malden han permitido que muchos septiares los encuentren y que en total ya haya más de cien mil personas viviendo en el lugar, entre Aiel y gai'shain.

Sevanna continúa rodeándose de infinidad de joyas y solícitos sirvientes sin preocuparse por nada más hasta que los Shaido son atacados por la coalición de fuerzas formadas por los aliados del marido de Faile, Perrin Aybara, los seanchan y los Juramentados del Dragón. La mayoría de las Sabias capaces de encauzar son puestas fuera de combate al diluir horcaria en el suministro de agua, con lo que los Shaido sufren una derrota contundente en la Batalla de Malden y el clan se considera definitivamente dispersado, con unos pocos supervivientes liderados por Therava que regresan al Yermo de Aiel. Sevanna ofrece una inesperada resistencia en su tienda pero al final es reducida y hecha prisionera por los seanchan. La última vez que se ve a la Shaido está desnuda y atada al caballo de la comandante Tylee Khirgan, quien la expone ante los soldados victoriosos antes de llevársela con el resto de los numerosos cautivos Aiel que han capturado.

Personalidad[]

Aun antes de su primera aparición, Sevanna ya era presentada como una mujer de gran ambición, pero ésta creció hasta límites insospechados y fue la gran impulsora de la ruptura de los Shaido con el resto de los clanes Aiel y las costumbres. Egocéntrica y caprichosa, Sevanna desea con todas sus fuerzas el poder y la deferencia del resto del mundo hacia ella. Ama el lujo y se adapta con pasmosa rapidez a las costumbres de los habitantes de las tierras húmedas que más le convienen, incluyendo el uso de finas vestiduras, abarrotar todas las partes de cuerpo con joyas, montar a caballo y ser atendida por un ejército de solícitos sirvientes. Esto no impide que Sevanna desprecie profundamente a los que no son Aiel y los considera marcadamente inferiores a su clan. Así mismo, la Shaido desconfía del Poder Único y no deja de sentir cierta envidia hacia quienes pueden servirse de él, razón por la que ansiaba con avidez servirse de Galina para poder hacer todo lo que le estaba vedado a ella.

Relaciones[]

Artículo principal: Sevanna/Relaciones

Aun antes de la Guerra Shaido la forma de ser Sevanna ya se consideraba que estaba alejada de la esperada en una Señora del techo, pero siempre contó con la adhesión de la mayoría de su clan y en particular de su septiar, el Jumai. Aceptando que los liderase Sevanna hasta que un candidato a jefe de clan pase la prueba de Rhuidean, los Shaido la han seguido hasta el final, aunque es cierto que en los últimos tiempos despertó varias suspicacias y tensiones, en particular con las Sabias antes fieles a ella. Sevanna considera el ji'e'toh como un mero instrumento a sus planes y no duda en esquivarlo si así le conviene. Sólo así se pueden explicar algunas de sus decisiones más cuestionadas, como pretender casarse con Rand al'Thor, asesinar a Desaine, traicionar a las Aes Sedai o tomar gai'shain entre la gente de las tierras húmedas y conseguir capturas de personajes tan importantes como Faile Bashere, Morgase Trakand, Alliandre Kigarin o Galina Casban.

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