
Vara Juratoria
Un vinculador es un tipo especial de ter'angreal creado durante la Era de Leyenda con el propósito de hacer efectivo cualquier juramento o promesa realizado sobre él, de tal forma que la persona que ha jurado sobre uno de ellos no será capaz de romper conscientemente su palabra, a no ser que se use ese mismo vinculador o algún otro para liberarlo. El vinculador más famoso y empleado durante la Tercera Era ha sido la llamada Vara Juratoria, que ha permanecido en la Torre Blanca durante siglos y ha sido utilizado por las Aes Sedai para formular los Tres Juramentos.
Aspecto[]
Al parecer, todos los vinculadores tienen la forma de un pequeño bastón cilíndrico de color marfileño, con un diámetro algo menor que el de una muñeca y tan largo como un antebrazo, aproximadamente. Pese a que algunas teorías apuntaban a que la Vara Juratoria podía ser uno de los Nueve Cetros de Dominio de la Era de Leyenda, esto fue denegado al señalarse la existencia de los vinculadores, cuyo número debía superar, como poco, el centenar. Esto fue aclarado al confirmarse que cada vinculador poseía un pequeño número grabado cerca de uno de sus extremos en caracteres de la Antigua Lengua. La Vara Juratoria tiene el número 3, pero otro vinculador recientemente descubierto presenta el número 111. Todos estos ter'angreal son suaves e inesperadamente fríos al tacto.
Utilización[]
El propósito que se daba a los vinculadores en la Era de Leyenda era bien diferente al uso que se les ha conferido en la Tercera Era, para sorpresa de los Renegados, los únicos que han presenciado con vida los momentos finales de ambas Eras. Los vinculadores fueron concebidos como medio de castigo para aquellas personas capaces de encauzar el Poder Único que habían cometido algún tipo de acto criminal. Es imprescindible que la persona que va a prestar juramento sobre un vinculador cualquiera pueda encauzar el Poder Único, independientemente de que sea ella u otro individuo distinto el que encauce sobre la pequeña vara un pequeño flujo de Energía a la vez que pronuncia sus promesas. Para aquéllos que no podían encauzar existía la Silla Vinculante, aunque se desconoce su naturaleza exacta.

Semirhage (por Googoolini)
En un mundo en que apenas existía el mal, el hecho de que un Aes Sedai tuviera que prestar juramentos sobre un vinculador era un hecho tremendamente excepcional. Aun así, la filosofía general de la Era de Leyenda también se hacía manifiesta en este castigo, el más alto del que se tiene noticia, ya que no se inhabilitaba a aquél que hubiera cometido un acto malévolo, sino que simplemente se impedía que volviera a hacerlo prestando un juramento vinculante. Por sus actos aun antes de la Guerra de la Sombra, Semirhage estuvo a punto de ser obligada a someterse a un vinculador.
Los vinculadores también pueden utilizarse para retirar juramentos, aunque se trata de un proceso muy doloroso y son pocas las personas que están al tanto de que esto sea posible. Los juramentos son automáticamente retirados si la persona ha sufrido un proceso de seccionamiento. Si ocurriera el caso de que dos juramentos realizados sobre un vinculador entraran en conflicto, la persona sería incapaz de reaccionar ante ninguno de ellos y se asfixiaría lentamente si no se retira de inmediato uno de los juramentos enfrentados entre sí.
El efecto más claramente apreciable causado por los vinculadores es el conferir un aspecto intemporal a todo aquella persona que haya realizado uno o más juramentos. Éste, junto con la sensación de estiramiento de la piel que sienten durante el primer año tras haber realizado los Tres Juramentos, son la principal señal física distintiva entre las Aes Sedai de la Tercera Era y otros grupos de mujeres encauzadoras. Además, existe otro efecto secundario achacado al uso de vinculadores, que sólo recientemente se ha redescubierto por las actuales Aes Sedai: estos ter'angreal acortan sensiblemente la vida de quienes realizan juramentos sobre ellos. De esta forma, mientras que las Aes Sedai más longevas rara vez superan los trescientos años de edad, se tienen noticias de damane y Allegadas que han alcanzado los cinco siglos, si no más.
Vinculadores conocidos[]
- Vara Juratoria: el vinculador más conocido y el que se ha utilizado más extensivamente a lo largo de toda la Tercera Era. En los últimos dos mil años todas las Aes Sedai han prestado sobre ella los Tres Juramentos.
- Vinculador que Sammael entregó a Sevanna y los Shaido Aiel. Actualmente se encuentra en posesión de Therava.
- Dos vinculadores más, en posesión de Moridin.
- Se desconoce si el Ajah Negro posee su propio vinculador o bien ha recurrido a la Vara Juratoria para ligar a sus integrantes a los Juramentos de la Sombra.